miércoles, 20 de abril de 2011

OPINIÓN SOBRE EL TRABAJO DE LOS GITANOS

Una vez finalizado el trabajo sobre los gitanos, quiero expresar que me ha parecido muy interesante porque he conocido más a fondo la cultura de este colectivo, sus pensamientos sobre el papel de la mujer gitana y la percepción que tiene la sociedad sobre ellos.

Al observar todos los aspectos relevantes estudiados, me he dado cuenta de que, en muchos casos la situación de exclusión y de riesgo social existe también en la población en general, no sólo en el colectivo de gitanos, puesto que actualmente las dificultades de acceder al ámbito laboral les afectan a todos los ciudadanos y ésto provoca una situación de exclusión en la sociedad, al no poder acceder a los distintos servicios de ésta.

También, propusimos la campaña de sensibilización para concienciar a la clase sobre que, los gitanos son otro colectivo como cualquier otro y no por qué los medios de comunicación muestren una imagen negativa sobre ellos, debemos creernos ésta, puesto que sería interesante que cada vez que se mostrara una información negativa, fuésemos a descubrir si en realidad esa información es cierta o es errónea. Ésto ocurre en el programa “Callejeros”, en el que sólo se expresan connotaciones negativas y las personas que perciben el programa creen lo difundido y no descubren por sus propios ojos si es cierto o no.

Una vez me ocurrió un caso como este comentado, donde observé en este programa el barrio de Torreblanca, donde se expresaba que era un lugar con unas condiciones insalubres, donde existía mucho trafico de drogas y los hogares se encontraban en malas condiciones de conservación. Así, que un día tuve que ir para realizar un trabajo con una compañera, me enseñó su barrio y vi que lo transmitido en la televisión no era cierto porque era un barrio como cualquier otro, es decir, normal y me di cuenta que lo único que le interesaban a los medios de comunicación era sacar la parte marginal de este lugar.

Por otra parte, la cooperación y relación con las demás compañeras ha sido buena porque nos hemos organizado de forma correcta, apoyado cuando hemos tenido alguna dificultad al comprender algún concepto y al realizar algún apartado del trabajo, hemos respetado las opiniones y aportaciones de las compañeras y por último, elegimos dos días a la semana para dedicárselo al trabajo, como fueron martes y miércoles por la tarde de 17:30 a 21:00 horas.

Con respecto a la exposición del trabajo, me he sentido tranquila, aunque pensaba que me iba a poner más nerviosa al podermese olvidar algún apartado de la exposición o al ver que no les interesaba el tema a los compañeros, al ser un tema poco novedoso. Pero menos mal que todo salió muy bien y a los compañeros le gustaron la exposición, al ser amena con distintas y varias dinámicas, las cuales las realizamos durante la exposición y no al final, para que fuera divertida la exposición y no se aburrieran.

También observé al finalizar con el breve debate, que ellos comentaban que es cierto que los gitanos se sienten excluidos en la sociedad como muchas personas payas y que muchas veces en las peleas no son los culpables ellos, sino los payos. Por eso, no debemos generalizarlos a todos como que son iguales y eliminar los estereotipos como “los gitanos son unos vagos”, porque no es que ellos no quieran trabajar, sino que la situación laboral actual está muy difícil para toda la sociedad y no sólo para el colectivo gitano.

Para concluir, en general este trabajo me ha parecido adquisitivo realizarlo porque he aprendido mucho al conocer la cultura gitana más a fondo y al transmitirle a mis compañeros que este colectivo no es homogéneo, sino heterogéneo y que debemos intervenir con ellos porque nos pueden aportar mucha información relevante. Así, también podremos eliminar los estereotipos y prejuicios que todos tenemos sobre ellos, aunque muchas personas no lo reconozcan y podremos actuar en un futuro con él, para sacarlo de la marginación y exclusión donde actualmente se encuentran algunos de ellos.

DIARIO DE TRABAJO EN GRUPO (2)


Después de varias reuniones del grupo, hemos ido dando forma a las primeras ideas que teníamos respecto a lo que sería nuestro trabajo.

Una vez planteado el marco teórico y la aplicación práctica, nos queda por terminar de plantear las conclusiones y la autoevaluación además de colocar los anexos, para más tarde montar el power point para la exposición del tema.

Podemos decir que la elaboración de este está llegando casi a su fin, y el interés que nos ha ido suscitando, nos ha llevado a desarrollar una tipología de trabajo un tanto peculiar. Es por esta peculiaridad en la metodología, por la que no sabemos si se van a cumplir las expectativas que nos estamos proponiendo. No obstante, estamos motivadas por lo que hasta ahora llevamos planteado y confiamos en que los objetivos de los que partimos se pueden cumplir.


DIARIO DE TRABAJO EN GRUPO (1)


Desde un principio teníamos claro que queríamos trabajar con el colectivo de los gitanos, pero sobre lo que teníamos dudas era hacia dónde enfocar el trabajo de intervención. Las dos vías que nos planteábamos eran las de incidir sobre la sociedad en general, o sobre el colectivo gitano en sí.

Tras una serie de reuniones entre las miembro del grupo y con la profesora, decidimos que lo mejor era focalizar el trabajo hacia la sociedad en general por varias razones, entre las que podríamos destacar la facilidad de acceso a la información y la intervención poco usual en estos términos.

En la última reunión grupal, estuvimos planteando a grandes rasgos los objetivos de nuestro trabajo:

- Sensibilizar a una parte de la comunidad universitaria

- Acercar la cultura gitana a este grupo concreto

- Acercar la realidad laboral y educativa del colectivo gitano a dicha parte de la sociedad

Una vez nos planteamos los ejes centrales de nuestro trabajo, estuvimos proponiendo diferentes alternativas de presentación, las cuales iremos concretando a medida que vayamos desarrollando el trabajo.

Y por último, concluir diciendo que estamos motivadas para seguir trabajando sobre esta temática, que más tarde daremos a conocer. Tratando de conseguir con ello, los objetivos previamente propuestos.

lunes, 18 de abril de 2011

SALUD MENTAL

Para comenzar, es importante destacar que la Salud mental involucra un balance en todos los aspectos de la vida: física, mental, emocional y espiritual. Es la habilidad de poder gozar la vida y a la vez de enfrentar los desafíos diarios, ya sea tomando decisiones, lidiando y adaptándose a situaciones difíciles o dialogando, acerca de nuestras necesidades y deseos.




Así como la vida y las circunstancias cambian continuamente, así también nuestro carácter, pensamientos y sentido de bienestar. Es importante encontrar un balance en la vida tanto a través del tiempo como bajo diferentes circunstancias. A veces es natural sentirse desequilibrado, es decir, triste, preocupado, temeroso o sospechoso. Pero este tipo de sentimientos se convierten en problema cuando empiezan a obstaculizar la vida diaria por un prolongado período de tiempo.




En este momento es cuando aparecen los primeros síntomas de una enfermedad mental, los cuales son trastornos del sueño, tristeza, miedo, ansiedad, dificultad para pensar con claridad, conducta agresiva, abuso de sustancias, percepción visual o auditiva de cosas que otras personas no ven u oyen, etc. Estos signos o síntomas pueden variar según cada persona y el grado del trastorno mental.




Por ello, me gustaría exponer un testimonio real, ocurrido a una joven llamada Laura. A esta chica le diagnosticaron esquizofrenia paranoide a los 21 años, al verse en una situación con mucho estrés mientras estudiaba periodismo. Sus padres no sabían lo que me pasaba, la llevaron al hospital donde la ingresaron y diagnosticaron enseguida. Ella recuerda que al poco tiempo de estar allí, era totalmente consciente de dónde estaba y de lo que le pasaba, pero fueron momentos muy duros para ella.



Al final, Laura supo salir adelante con su enfermedad y actualmente, lleva una vida totalmente normal como cualquier persona.



Según la percepción de Laura, piensa que "la enfermedad de esquizofrenia consiste en delirios que aparecen cuando surgen los "brotes", pero que luego con la medicación desaparecen. En esos momentos, no eres consciente de la realidad, te imaginas cosas que no existen, deliras".



"Yo tuve ese primer brote, pero como con la medicación se me quitó, los médicos pensaron que era una cosa puntual, y al cabo de un par de años me retiraron todas las medicinas. El resultado fue que a los tres años de haber tenido el primer brote, tuve otro. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que tenía la enfermedad de manera crónica, y desde entonces tomo medicación".



"Actualmente solamente sufro ansiedad, dificultades de concentración y de memoria...pero no he vuelto a tener ninguna recaída desde 1992, y me han dicho que probablemente tomando mi medicación ya nunca volveré a tenerla".



Con respecto al trabajo, Laura dice: "Yo estudié periodismo y no he podido trabajar de mi carrera, es una profesión muy estresante y me la desaconsejaron. La realidad es que todo aquello que me produce estrés o que se sale de la rutina me provoca un empeoramiento".



"Laboralmente al principio fue una frustración muy grande, porque yo quería trabajar de lo que era mi vocación. A pesar de esto, he tenido suerte. Me llamaron del INEM para trabajar en la filmoteca como documentalista y más tarde comencé a trabajar en una empresa que gestiona recursos sociales, donde llevo ya nueve años. Lo único que me entristece es que estoy haciendo un trabajo inferior a mis capacidades".



En cuanto a la comunicación con los demás, Laura expresa: "No suelo comentarle a nadie que tengo esta enfermedad, lo sabe mi familia más cercana y poco más. Además, soy de un pueblo pequeño y lo que más miedo le da a mi familia es que se enteren allí de lo que me pasa. La gente del pueblo es muy ignorante y se ríe o no lo acepta".



"De hecho, la primera vez que tuve un brote, recuerdo que en mi pueblo algunos se enteraron porque me vieron muy mal. Cuando mis padres me llevaron allí yo todavía estaba con ideas delirantes y muy medicada. Recuerdo que se reían de mi, me dieron de lado. En aquella época mis amigas no querían que saliera con ellas porque no querían que me vieran con ellas o que los demás supieran lo que me había pasado. Eso no eran amigas".



"Ahora tengo otras amistades desde hace muchos años, pero reconozco que cuando me puse enferma fui yo la que cambió de amigos. No me gustaba el tipo de vida que llevaban. Bebíamos bastante y yo misma decidí cambiar, dejar de beber. Ahora pienso que la decisión fue acertada".



En relación a la medicación, ella comenta:"Antes tomaba mucha medicación con muchos efectos secundarios y estaba bastante mal. Con el tiempo se han ido descubriendo nuevos fármacos y ahora mismo solo me tomo una pastilla (un antipsicótico, la que te impide tener recaídas) y otra que es un ansiolítico. Con eso me mantengo, porque llegué a tomar 11 pastillas diarias".






Imagen mujer de espaldas"Tengo alguna amiga que ha tenido recaídas por no tomarse la medicación, y pienso que son personas que no tienen conciencia de enfermedad. También conozco a muchas que además consumen alcohol y evidentemente están peor de lo que podrían estar".




"Aprovecho para decirle a la gente joven que no consuman drogas ni abusen del alcohol, porque se está demostrando que la gente que consume cannabis o pastillas de éxtasis (no hay que olvidar que las drogas son alucinógenas) puede desarrollar la enfermedad si se tiene predisposición genética a tenerla".



Con respecto a las ayudas, ella dice: "Yo no tengo ninguna ayuda porque como estoy trabajando vivo de mi sueldo. Muchas veces me he planteado independizarme porque vivo con mis padres, pero es imposible. Por eso reclamo derecho a una vivienda. Hay enfermos que tienen una pensión no contributiva porque no han cotizado o trabajado nunca y no pueden acceder a una casa a no ser que les den ayudas".



"Como estoy trabajando también me tengo que pagar la medicación, y las pastillas que tomo son carísimas. Sólo si hago la declaración de la renta con mis padres como "hijo minusválido a cargo", les dan algo de dinero, aunque es muy poco".



En cuanto a la discapacidad, Laura expresa:"La esquizofrenia es una discapacidad psíquica. Si vas a los servicios sociales y te ve un psicólogo te reconoce el tanto por ciento de discapacidad que tienes. Actualmente dividen las discapacidades en físicas, sensoriales y psíquicas. Las enfermedades mentales deberían considerarse aparte de las psíquicas, porque en esa clasificación se encuentran los retrasados, los síndrome de Down, y la inteligencia en nuestra enfermedad la tenemos igual que antes, lo único que nos falla, es que como tomamos una medicación muy fuerte, nos falta concentración. Por lo demás, mi vida es completamente normal".



Según las propuestas que expresa, Laura dice que:"Me da mucha rabia que no haya psicólogos que te puedan atender en la seguridad social porque si quieres ir a verlos tienes que pagar. Pediría también que hicieran residencias para los enfermos que no están capacitados para vivir solas, porque cuando se mueren los padres, ¿Dónde van esas personas? También reclamaría más subvenciones para las asociaciones, porque viven principalmente de las aportaciones de los que somos socios".



Al observar este caso ocurrido realmente, me doy cuenta de que muchas personas no respetan y se dan cuenta de que las personas enfermas mentalmente necesitan el apoyo de todas las personas y no la discriminación y marginación, puesto que les afecta en su día a día y puede causarles síntomas como tristeza, ansiedad, etc, que les perjudicará en su vida diaria y sobre todo en su recuperación.



Según una noticia digital del 2010, la policía del suroeste de China arrestó al director de un refugio privado para indigentes en el condado de Quxian, en la provincia de Sichuan, bajo cargos de vender a once residentes, algunos con discapacidad mental, como mano de obra forzosa a una fábrica remota.




Esta situación es muy cruel e inhumana, puesto que el director no tiene conciencia de que estas personas tienen problemas mentales y no pueden abusar de ellos porque, en primer lugar son personas humanas y segundo, no pueden desarrollar las capacidades que el comprador desea.



Esta noticia es uno de los muchos ejemplos de abusos a las personas con problemas mentales, los cuales se han producido en etapas anteriores y actualmente, aunque hoy en día existen menos casos de explotación laboral en la sociedad, excepto en China.




En la sociedad en general, los enfermos mentales están expuestos en todo el mundo a una amplia gama de violaciones de los derechos humanos. La estigmatización hace que a menudo sean aislados y no reciban los cuidados que necesitan. En algunas comunidades, como China, son expulsados, abandonados sin comida y semidesnudos, atados y apaleados.



Los enfermos mentales también tienen que enfrentarse diariamente a la discriminación en la educación, el empleo y la vivienda. En algunos países incluso se les prohíbe que voten, se casen o tengan hijos.



Para finalizar, es necesario cambiar estos pensamientos y se pueden conseguir mediante las siguientes propuestas:







  • Cambiando las actitudes y aumentando la concienciación. Los Ministerios de Salud, los grupos de usuarios de los servicios de salud mental y sus familiares, los profesionales sanitarios, las organizaciones no gubernamentales, las instituciones universitarias, las organizaciones profesionales y otros interesados deberían unir sus fuerzas para educar a la población y cambiar sus actitudes hacia las enfermedades mentales, además de abogar por los derechos de los enfermos mentales.





  • Mejorando los derechos humanos en los servicios de salud mental. Se deben crear mecanismos de vigilancia de los derechos humanos para proteger a los pacientes del trato inhumano y degradante, de las malas condiciones de vida y de los ingresos y tratamiento involuntarios inapropiados y arbitrarios. Los pacientes también deben tener acceso a mecanismos de reclamación en caso de violación de sus derechos humanos.







  • Dando poder efectivo a los usuarios de los servicios de salud mental y a sus familiares. Los gobiernos deben apoyar la creación o fortalecimiento de las organizaciones de usuarios de los servicios de salud mental y de sus familiares. Dichos grupos se encuentran en la mejor posición para señalar los problemas, explicar sus necesidades y contribuir a encontrar soluciones para mejorar la salud mental en los países, por lo que tienen una función esencial que desempeñar en el diseño y aplicación de las políticas, planes, leyes y servicios.





  • Sustituyendo las instituciones psiquiátricas por la atención en la comunidad. Las grandes instituciones, tan a menudo asociadas a violaciones de los derechos humanos, deben ser sustituidas por centros comunitarios de salud mental, apoyados por camas de hospital para pacientes psiquiátricos en los hospitales generales y la atención domiciliaria.





  • Aumentando la inversión en salud mental. Los gobiernos tienen que dedicar una mayor proporción de sus presupuestos sanitarios a la salud mental. Además, es necesario desarrollar y formar a más profesionales de la salud mental con el fin de asegurar que la población tenga acceso a servicios de salud mental de calidad en todos los niveles del sistema de atención sanitaria.






  • Adoptando políticas, leyes y servicios que fomenten los derechos humanos. Los países deben poner en práctica políticas, leyes y servicios de salud mental que fomenten los derechos de los enfermos mentales, les den poder efectivo para hacer elecciones sobre su vida, les proporcionen protección legal y les aseguren su plena integración y participación en la comunidad.



Para finalizar, me gustaría destacar que al conocer mucha información sobre este colectivo, pienso que el intervenir con éste puede ser difícil pero no imposible, ya que antes de actuar con estas personas es relevante realizar un curso de orientación sobre esta enfermedad, para también poder trabajar con los familiares de estas personas.



Asimismo, menciono que el intervenir y trabajar con este colectivo tiene que ser complicado y que muchos de los problemas que les ocurran a estas personas pueden afectar a los profesionales en la vida externa a su trabajo. Con respecto a mi punto de vista, es uno de los temas que más respeto me da, aunque no lo dejo a un margen a la hora de conocerlo.



No obstante, la intervención directa con un colectivo es lo que me hará darme cuenta de que, si sirvo para trabajar con este colectivo o no me veo capacitada para hacerlo.







viernes, 1 de abril de 2011

¡TE QUIERO TAL COMO ERES!

Con respecto a las intervenciones de los educadores sociales, éstos pondrán un empeño especial en conseguir que el niño con síndrome de Down desarrolle sus capacidades de atención, observación, percepción y discriminación, que le facilitarán una actuación adecuada en cada momento. Como es natural los niveles o exigencias serán un poco más altos cada vez, de modo que el niño progrese en todas sus capacidades. También ahora será preciso seguir un programa sistemático y estructurado para lograr que el niño esté bien preparado para los aprendizajes escolares. La situaciones naturales y espontáneas en las que el niño desarrolla y hace uso de su capacidad discriminativa, son necesarias, pero insuficientes para participar después con éxito en la escuela.

Los niños con dificultades de aprendizaje en general y con síndrome de Down en particular, necesitan ver y hacer de un modo sistemático y ordenado, para aprender y comprender. Esta necesidad implica que el educador haga un buen programa, aprovechando cada una de las tareas realizadas por su alumno. En cada una de las tareas el niño debe recibir una buena información verbal de lo que realiza. Además, en torno al objetivo fundamental de esa actividad, se aprovechará esa tarea para repasar o afianzar objetivos de otras áreas.

Un ejemplo podría ser el de un alumno que debe desarrollar el uso y la coordinación de ambas manos, cuando habitualmente "ignora" una de ellas. Si el educador elige la tarea de abrir y cerrar unos cilindros o toneles encajables de colores, se aprovechará esta actividad para "repasar" la asociación de color y tamaño, los conceptos abrir-cerrar, meter y sacar, ¡más-más! Si se puede se harán una o dos torres, se compararán las alturas, se repasará el concepto encima. Al recoger todos los toneles, el niño comprenderá las relaciones entre los diferentes volúmenes y afianzará su comprensión sobre la permanencia del objeto. Será preciso que el educador le ayude a observar, dándole la información verbal precisa sobre lo observado. Así el niño incrementa su compresión. Es preciso evitar grandes discursos y frases largas, que serían un obstáculo para que el niño capte la palabra clave que describe el concepto o la acción.

También se indicará a la familia que aproveche las situaciones naturales que brinda el hogar, para que el niño participe en tareas en las que tiene que hacer uso de sus capacidades perceptivas: desde clasificar los cubiertos que se sacan del lavaplatos, hasta colaborar en la descarga y orden de la compra hecha en el supermercado, o recoger bien su ropa y juguetes. En estas acciones realizadas en el hogar, es fácil incorporar los conceptos básicos: grande-pequeño, dentro-fuera, encima-debajo, etc. que el niño aprende en la realidad y practica en situaciones diferentes, facilitando su consolidación, transferencia y generalización. Muchos niños no avanzan más porque no se aprovechan las situaciones naturales, ordinarias, para que piensen y aprendan.

Según una noticia digital de la Agencia Peruana Andina, en el Centro Educativo Básico Especial “Solidaridad” la directora solicita a alguna institución o personas con solvencia económica, que puedan apadrinar, solo durante su edad educativa, a alguno de los alumnos con Síndrome de Down, ya que son muy pobres, no tiene recursos para poder alimentarse y tampoco una buena educación. Por ello, la directora pide ayuda porque al ser la mayoría niños desnutridos, pues desarrollan sus habilidades y destrezas más lentamente. Aunque el centro les apoya y ayuda al enseñarles cómo deben hacer las labores del hogar, a adaptarse en la sociedad y puedan en un futuro desenvolverse en el campo laboral.

También, la directora hace una petición a los padres de los niños con Síndrome de Down, diciéndoles que refuercen en casa lo que el niño va aprendiendo a diario en la escuela, para que así los niños puedan adaptarse a la familia y lleguen a hacerlos independientes.

Según mi opinión, estos niños con Síndrome de Down necesitan afecto, cariño y apoyo para que puedan desarrollarse tanto personal como socialmente. La evolución de ellos también es más lenta porque son familias con escasos recursos económicos y, además éstas no pueden atender todas las necesidades de sus hijos, aunque si podrían ayudarles a ser independientes gracias al impulso que deben establecer ellas en sus hijos, para que aprendan como se ha dicho las tareas del hogar. Así, estos niños podrán desarrollar una vida como cualquier otra persona sin Síndrome de Down.


Para concluir, expreso que las personas con síndrome de Down están demostrando cada vez más que son merecedores de la confianza que se está poniendo en ellos al promover su integración social plena. Ellos merecen ser respetados, ayudados y apoyados por todas las personas, ya que son seres humanos y por que tengan algunas características distintas a las de las personas normales, no significa que ya los tengamos que aislar y alejar de nuestras vidas. Al contrario, tenemos que darle todo nuestro cariño para que puedan desarrollarse tanto personal como socialmente e integrase en la sociedad sin impedimento.

Para que se consiga la integración de estas personas con Síndrome de Down, es imprescindible la actuación de los Educadores Sociales, ya que es el profesional que más les puede ayudar para su desenvolvimiento en la sociedad.

Por ello, en un futuro me gustaría conocer más a fondo y poder intervenir con este colectivo, además con el de Autismo, porque he observado que necesitan mucha ayuda educativa para llegar a ser independientes y poder luchar por sus derechos y oportunidades laborales.

¡TE QUIERO TAL COMO ERES!

En las décadas anteriores, en la sociedad se le designaba a un niño con Síndrome de Down como “mongolo” o“idiota”, portador de estigmas, separado de la sociedad y sin capacidad para aprender, pasando a considerarse a la persona con síndrome de Down como aquel individuo con una configuración cognitiva diferente y característica que, con una educación adecuada, podrá convertirse en un ser autónomo.

Actualmente, la mayoría de los ciudadanos tienen o deberían tener en cuenta que todo niño con síndrome de Down o sin él, es una persona individual, cuyo desarrollo de su personalidad y de su ser físico y mental, dependerá de los factores genéticos hereditarios y de las influencias culturales y ambientales que, unidas, distinguen a toda persona de cualquier otra.

Por ello, cuando hablamos de las características que tienen las personas con Síndrome de Down, no podemos decir que todas las personas tengan las mismas características y sean de la misma forma porque depende de muchos factores como se ha mencionado. Por ejemplo, se dice que una persona con este trastorno tiene poca capacidad de respuesta a la interacción de las personas, pero ésto dependerá de diversas variables como el grado de pasividad y expresividad de la persona con Síndrome de Down, la mentalidad y educación de las personas como padres, amigos, etc. También, el contacto ocular de un menor con este trastorno se dice que aparece hacia las siete u ocho semanas de nacer, pero ésto dependerá de cada niño.

Con respecto a la integración de los niños con Síndrome de Down o trisómicos-21 en el ámbito educativo, éstos pueden estar físicamente integrados dentro de la escuela normal sin estar realmente integrados socialmente. Asimismo, la integración académica sugiere que estos niños aprendan con los niños “normales”, pero no necesariamente en todas las ocasiones e igual que los otros porque no tienen las mismas capacidades que los niños “normales”.


Según mi opinión, si lo que perseguimos es la integración social, es necesario que los menores compartan clases con los niños normales. Para llegar a esta integración social es necesario lograr un aprendizaje social y que mejor manera que ir desarrollando este aprendizaje desde un primer momento. Esto es totalmente lógico, ya que la integración no es algo repentino sino que ésta se debe ir logrando de modo paulatino.
La mejor mentalización empieza en la infancia, ya que el niño normal no experimenta ningún prejuicio ante el niño con Síndrome de Down. Asimismo, es en la edad preescolar donde con mayor facilidad pueden establecerse las bases de una sólida integración del niño con su entorno, y primeramente con sus compañeros de edad. Las dificultades que en algunos centros preescolares pueden encontrarse por la presencia de algún niño trisómico-21 se han debido fundamentalmente a los padres de los propios compañeros más que estos mismos. Son los adultos los que tienen problemas de prejuicios sociales, pero no los niños.


Por otra parte, para la integración de estos niños en la sociedad es necesario la intervención de un/a Educador/a Social, para que tengan un normalizado desarrollo personal y social. Por ello, cuando van a realizar alguna actividad, el educador social tiene que darle tiempo y enseñarles a inhibirse para darse a sí mismos unos segundos de reflexión antes de que comiencen los menores a realizarla. Si el niño está trabajando con papel y lápiz, el educador debe sujetarle suavemente las manos para que no actúe mientras le da la orden y así el niño la recibe, la procesa y elabora la respuesta hasta que muestra con su actitud o con su mirada, que va a ejecutar la acción correcta. Si, a pesar de esos segundos de tiempo, el niño se dirige al objeto o estímulo que no corresponde, el adulto puede tapar con su mano dicho objeto, así el niño tiene la oportunidad de volver a pensar y responder con acierto. Si la actividad se realiza en una hoja de papel, antes de darle la pintura o el lápiz, se pedirá al niño que señale con el dedo dónde está el objeto que debe tachar o subrayar, o que siga con su dedo la trayectoria que debe realizar.

Siempre que sea posible, y lo es en muchas ocasiones, se dará a elegir al niño qué prefiere hacer. Un alumno que se "compromete" al decidir sobre una tarea o un material, es un alumno que mantendrá su atención con más facilidad o al que podemos ayudar a ser consecuente y responsable de sus decisiones... "Me lo has pedido", "Tú lo has elegido, por tanto vamos a acabar antes de...". Es cierto que el educador es quien tiene claro el objetivo u objetivos de la sesión, pero un buen educador sabe que esos objetivos pueden trabajarse de modos muy diferentes, con materiales variados y que un cambio en el orden de las actividades no tiene importancia. La flexibilidad controlada, permitirá un mejor aprovechamiento del tiempo. La imposición de una tarea que el niño no desea, es un fracaso seguro para todos. El truco educativo es conseguir que el niño "quiera" hacer aquello que el educador cree que le conviene hacer.

COLECTIVO AUTISTA


Para comenzar, el término “Autismo” que proviene del griego y significa “sí mismo”, fue tomado por Kanner del término planteado por Bleuler originalmente, siendo este último en 1911 quien lo utiliza para referirse a los pacientes con esquizofrenia que tendían a retirarse del mundo social para sumergirse en sí mismos a las fantasías de sus pensamientos (Frith, 1999). Kanner toma el término para referirse a la incapacidad para establecer relaciones sociales, diferenciándose del concepto de Bleuler por que consideraba que las personas con autismo tenían una deficiente imaginación (Riviére, 1997).

Actualmente, se sabe que el autismo ocurre en cualquier familia, de cualquier cultura, nivel socioeconómico y etnia, más allá de los patrones de apego y formación vincular.

Asimismo, es necesaria la realización de un diagnóstico para detectar si algunas personas padecen este trastorno, para luego llevar a cabo una intervención.

En cuanto a los menores, es esencial una intervención temprana para potenciar al máximo las capacidades de desarrollo personal y social del niño y la oportuna guía y orientación a sus familiares y educadores. Sin embargo, tanto el autismo como los demás trastornos generalizados del desarrollo, el diagnóstico e intervención temprana es sumamente difícil. Son pocos los niños que se cree que tienen autismo o síntomas parecidos, y que son derivados a los profesionales o centros especializados antes de los dos o tres años de edad, perdiendo un tiempo importante para la implementación de un programa integral de atención (Charman, Baird, 2002, Mendizábal, 1996).

Varios autores como Charman, Baird, Mendizábal, Allen y Gilberg y Baron-Cohen realizaron varios estudios de diagnóstico temprano y se observó que, los síntomas del autismo aparecen antes de los tres años pero es difícil descubrirlos durante el primer año de vida, viéndose más factible percibirlos durante el segundo año.

También, se debería hacer un estudio continuo que detecte tanto los casos ya con problemas durante el primer año, como los que desarrollan bruscamente los síntomas después del primer año entre los 12 y 18 meses, cuya última edad es más posible diagnosticar a través de las observaciones de los padres y educadores al evaluar los aspectos sociales del desarrollo.

Para llevar a cabo una buena intervención, es importante tener en cuenta las características básicas que comparten las intervenciones con mayor eficacia en los casos de Autismo, y son las siguientes:

  • Involucración de los padres.

  • Enfoque comunitario

  • Intervención temprana e intensiva.

Asimismo, antes de intervenir es necesario analizar los recursos y déficit de cada área del desarrollo del niño/a afectada para planificar los objetivos y estrategias de intervención óptimas, analizar la dinámica familiar (número de hijos, recursos intelectuales, emocionales y económicos, contexto escolar, etc) a la hora de planificar de manera personalizada la intervención de cada caso y planificar una intervención basado en un enfoque globalizado.

También es importante desarrollar unas técnicas de intervención como son realizar un horario personalizado; establecer un lenguaje claro y conciso; recompensar y premiar, para que los niños aumenten las habilidades de lenguaje; desarrollo de juegos; desglosar los aprendizajes en partes más pequeñas para facilitar la tarea y técnicas conductuales para el manejo de conducta.

Además de estas intervenciones, es necesario recordar en todo momento los siguientes aspectos:

  • Cualquier ayuda visual/escrita es de gran utilidad, como por ejemplo las normas.
  • Proporcionar guías escritas, claras y marcando paso a paso el trabajo que se le propone, como por ejemplo las responsabilidades que ellos tienen, la realización de actividades, etc.
  • Limitar opciones porque demasiadas a escoger, generan habitualmente confusión y ansiedad.
  • Proporcionar un espacio y un tiempo de descanso.
  • Proporcionar una persona punto de referencia para el niño/a, a quien puede acudir en caso de dudas o problemas y que le ayudará.
  • Desarrollar una enseñanza, adaptada en nivel y formato a la capacidad del niño/a.

  • Mantener el sentido del humor.
  • No tomar como una agresión personal las dificultades de comportamiento del niño/a.
  • Establecer un trabajo en equipo para repartir responsabilidades.
  • Los diferentes sistemas alternativos y la metodología que utilizamos varían en cuanto al grado de dificultad cognitiva que suponen a cada niño- a , por lo que la comprensión y utilización de los mismos es progresiva y varía en función del momento evolutivo de cada persona.

Para concluir, a pesar de sus significativas dificultades en el área de la comunicación, muchas personas autistas pueden comunicarse con los demás, siempre y cuando sean personas con las que tienen confianza y mantienen una continua comunicación. Tal acercamiento les facilita el desarrollo de los niños, tanto social como personal y pueden llegar a incorporarse en la sociedad. Esta integración puede facilitarse gracias a la ayuda y apoyo de la familia, profesionales como educadores sociales y psicólogos, etc. Por ello, en un futuro me gustaría conocer de cerca a este colectivo, y el de Síndrome de Down, ya que son muy parecidos y me motiva conocer las funciones y actividades educativas que se desarrollan con ambos colectivos.