viernes, 3 de junio de 2011

CONCLUSIÓN DE LA ASIGNATURA

Una vez llegado a este punto, o sea, al final del curso, tengo que destacar que la asignatura Intervención Educativa sobre Problemas fundamentales de Desadaptación Social me ha servido para incorporar muchos conocimientos nuevos que no conocía sobre los distintos colectivos que existen en la sociedad.

Aunque ha sido mucho trabajo llevar a cabo esta asignatura, ya que el blog me ha supuesto mucho esfuerzo al ser un trabajo continuo, sin poder dejar la realización de entradas para más tarde puesto que si no luego sería imposible cogerle el ritmo y ponerme al día.

Por ello, propongo que en los años posteriores se modifique la estructura de la asignatura, concretamente la del blog y se realicen también trabajos pero en menor cantidad, puesto que quita muchas horas de trabajo y estudio para otras asignaturas.

También, me gustaría mencionar que he aprendido más de lo que pensaba en esta asignatura, aunque he echado de menos interactuar e intervenir con la realidad porque, según mi opinión, es la forma con la que más me emotivo y me da fuerzas para seguir luchando, con el fin de conseguir un puesto laboral donde me sienta cómoda y feliz.

Con respecto a los distintos colectivos, quiero expresar que al conocer un poco más de cada uno de ellos mediante las exposiciones, me he dado cuenta de que me gustaría trabajar con la mayoría de ellos como pueden ser personas mayores; infancia, adolescencia y familias; personas en prisión; personas con problemas de drogadicción; mujeres maltratadas; discapacitados; etc. En cambio, me daría más respeto y me costaría más intervenir con los colectivos como mendigos y enfermos mentales. Pero no los dejo al margen, puesto que si me dan la oportunidad de poder intervenir con ellos lo voy a hacer, ya que pienso que hasta que una persona no interactue con un colectivo no sabrá si está capacitado para trabajar con él o no.

Para concluir, destaco que he aprendido más de lo que pensaba con esta asignatura y por ello, me gustaría que se siguiera impartiendo en la universidad. Además, te ayuda mucho a reflexionar y a concienciarte de que un/a educador/a social debe tener una serie de características y un perfil y que para poder trabajar con los distintos colectivos tienes que tener vocación para el trabajo. Hay que tener en cuenta que vamos a trabajar con personas, no con objetos. Si vemos que no tenemos paciencia, no somos empaticos, tolerantes, etc no podremos desarrollar nuestro trabajo adecuadamente y puede ocurrir que perjudiquemos a los usuarios por nuestra desmotivación.

Así, quiero acabar con una frase de Herbert Spencer que dice: “El objeto de la educación es formar seres aptos para gobernarse a sí mismos, y no para se gobernados por los demás”. Por ello, debemos enseñarles, motivarles, concienciarles, etc de que ellos mismos, con la ayuda de los profesionales como educadores sociales, pueden salir adelante y solucionar sus problemas, ya que con ganas y fuerza de voluntad se consigue TODO.




jueves, 2 de junio de 2011

PERSONAS SIN HOGAR

Para comenzar, esta entrada se centra en el colectivo de personas sin hogar.

Actualmente, cada vez existen más personas en la calle con insuficientes recursos para vivir. Muchos de éstos, afectados por la crisis, no forman parte del grupo de personas sin hogar, pero empiezan a requerir los recursos específicos destinados a éstos. Acuden a albergues, comedores sociales, centros de día y talleres ocupacionales, según expresa el informe “Cáritas ante la crisis”.

Además de estos recursos, aparece un servicio desarrollado en el trabajo de calle en Madrid, Sevilla, Granada y Murcia, que consiste en la preparación de los alimentos que se llevarán a las rutas y, termina con la limpieza en casa de los termos utilizados, que se realizará por turnos.

El café con leche que se ofrece a las personas sin hogar no es más que un pretexto para conversar un rato con ellas y ganarnos su confianza poco a poco, aquí empieza lo más importante del programa. Este servicio se convierte en una estrategia para poder intervenir con ellos y poder tener un primer contacto, con el fin de analizar su realidad social y conocer sus necesidades.

No obstante, necesitan otro servicio, como es el servicio sanitario, puesto que el 66% de las personas que viven en la calle no tienen acceso al sistema de salud y la otra parte reciben una cobertura sanitaria deficiente.

Por ello, pienso que es necesario llamar la atención sobre la situación de vulnerabilidad de las personas que viven en la calle o en infraviviendas, ya que como hemos visto en la asignatura de Salud Pública en el artículo 43 de la Constitución Española de 1978, toda persona tiene el derecho a la protección de la salud. Pero más concretamente lo que hay que reclamar, es el acceso a la salud de estas personas sin hogar porque hoy en día no se respetan muchos de los derechos de los ciudadanos y además, lo que necesitan estas personas son acudir a los centros hospitalarios cuando se encuentren enfermos.

En cuanto a las enfermedades que padecen las personas sin techo y sin hogar, éstas se relacionan con problemas de salud física, abuso de sustancias y problemas de salud mental.

Los hábitos y condiciones de vida del denominado "sinhogarismo" suelen implicar una dieta deficiente, poco descanso, falta de alojamiento y de higiene, lo que debilita el organismo y expone a las personas a un mayor número de focos de infección. La estigmatización, la discriminación, las agresiones que padecen en la calle, el desempleo y la dependencia de sustancias son otras circunstancias que agravan su situación y aumentan la incidencia de enfermedades, mayor en las mujeres (49,8%) que en los hombres (36,4%).

En cuanto a la discriminación y agresión que se produce hacia estas personas sin hogar, destaco que los educadores sociales tenemos un gran trabajo en la sociedad, ya que la principal tarea que tenemos es concienciar a los ciudadanos que todos somos iguales y que si estas personas se encuentran en la calle no es por gusto, sino por cualquier problema personal y social que les esté afectando negativamente en su vida y en la de su familia.

Es esencial tener una actitud empática para comprender la situación de cada persona, porque nunca hay que olvidar que detrás de cada historia vital hay una persona, la cual necesita ayuda y comprensión de los demás para poder reinsertarse en la sociedad y ser una persona “normal” e integrada como lo fue anteriormente.

Para finalizar, expreso que la reinserción de estas personas sin hogar es imprescindible. Asimismo, debemos plantearnos una línea de trabajo en el plano individual para que la persona sin hogar pueda avanzar hacia la máxima normalización posible en su vida, a partir de sus capacidades y su potencial. Para cosechar éxitos en este aspecto individual es muy importante el trato humano, es decir, acoger bien a la persona, ir creando confianza desde una gran proximidad e ir delegándole responsabilidades.

Los profesionales como educadores sociales debemos proponernos unos objetivos a la hora de intervenir con este colectivo. Pero no podemos olvidar que muchas personas tienen algunas recaídas o retrocesos y ésto no nos puede desilusionar, puesto que nunca se debe dar un caso por perdido porque en la vida nos podemos llevar muchas sorpresas.

Por eso, es fundamental ir trabajando los aspectos sencillos de convivencia, que nosotros hemos ido aprendiendo a lo largo de nuestra vida en el entorno más íntimo que ellos no han tenido. Esto significa que tenemos que respetar sus ritmos de aprendizaje. Tener muy claro que mi ritmo no es el de los demás. Es decir, tener una actitud empatica como he mencionado anteriormente. Además, tenemos que ser conscientes de que, al vivir estas personas muchos años de su vida en la calle, no pueden recuperarse en un mes, ni en dos, ni siquiera en un año.

Es necesario crear espacios de convivencia, donde se fomente el respeto y la tolerancia hacia la diferencia. La sociedad no cambia en función de montajes espectaculares. Los grandes cambios sociales han llegado siempre de manera desapercibida a partir de las pequeñas cosas que hace cada uno. Si somos capaces de ir creando un entorno que acepte al otro con la única pretensión de ver una persona, posiblemente con mucho sufrimiento a sus espaldas, contribuiremos a crear espacios de convivencia aptos para todos.


jueves, 26 de mayo de 2011

FADAIS: GRAN TRABAJO

El día 25 de mayo expusieron unas compañeras de clase el tema de las comunidades terapéuticas. Así, que decidieron traer unos profesionales a la exposición para que explicarán información relevante sobre la prisión, estas comunidades y otras cuestiones.

Por ello, nos visitaron dos profesionales (directora y educador social) y tres usuarios de la Comunidad Terapéutica FADAIS de Almonte (Huelva). En esta comunidad viven usuarios que han tenido problemas de drogadicción, alcoholismo, etc, que han sido derivados a este lugar por el centro que tienen destinado. Muchos de estos usuarios vienen a esta comunidad, una vez permanecido un periodo de tiempo en la cárcel.

Con respecto a esta exposición, me gustaría decir que ha sido con la que más he aprendido, ya que siempre he mencionado que el conocer a cada colectivo directamente hace que interioricemos más información y datos relevantes, ya que mediante la difusión de contenidos teóricos pues se aprende en menor cantidad y calidad.
Por ello, me impactó al ver a estas personas en la clase y sobre todo a medida que iban explicando el proceso y desarrollo de la comunidad terapéutica y, todas las cuestiones que se les planteaban.

En primer lugar, quiero destacar que estos profesionales realizan un gran trabajo, al interactuar, ayudar y motivar a estas personas a seguir adelante y a ser capaz de llevar una vida normalizada. Así, como pude ver en la exposición, los usuarios les están muy agradecidos a los profesionales por todo el trabajo que hacen con ellos y sobre todo, el respeto y amabilidad que tienen hacia ellos. No todos los profesionales son así y al ver a este tipo de personas da alegría y te das cuenta de que tenemos que tener vocación para trabajar con los distintos colectivos. Es decir, estos profesionales, según mi observación, son personas empáticas, comprensibles, solidarias, tolerantes, creativos, abiertas, fuertes y con mucha capacidades y experiencias previas.
Todas estas características son muy difíciles que una persona las tenga, pero si existen personas que las tienen.

Hay una frase que se me ha quedado de la exposición, que decía así: “no nos importa el dinero, ya que cuando estamos con los usuarios parece que no estamos trabajando”. Así, se puede observar cómo cuando un trabajo te gusta, lo que menos te importa es el salario, aunque es normal que lo recibas porque es tu deber, pero es más recompensante las gracias que continuamente te dan los usuarios y el ver cómo la mayoría de ellos evolucionan gracias a tu ayuda. Pienso que eso es lo más bonito que existe en la vida y que estas recompensan nos hacen ser personas más bondadosas y sobre todo, felices.

Otro aspecto que he detectado es que, la relación entre los profesionales y usuarios es muy buena, lo que ésto ayuda a que exista confianza y puedan darse consejos unos a otros. Esta buena relación pienso que es un motivo, que hace que los usuarios tengan tanto interés en formarse, se valoren como persona y, tengan fuerzas para seguir adelante y conseguan tener una vida normalizada.

En cuanto al papel del educador social, el perfil que nos ha mostrado Lucas es perfecto para ser un buen profesional, ya que según mi percepción, es una persona alegre, fuerte, abierta, muy creativa, empática, con muchas capacidades, que se deja conocer, con las ideas claras y responsable.
Con respecto a su trabajo, es asombroso todas las actividades que desarrolla él y lo motivado que se encuentra en él, ya que para decir que: "cuando va a la comunidad parece que no está trabajando". Ésto significa que se siente cómodo e ilusionado de estar allí y poder interactuar con tantas personas. Según mi opinión, cómo más se aprende es interviniendo y comunicándonos con los sujetos.

Para finalizar, quiero expresar que la labor que hace la Comunidad Terapéutica FADAIS es fantástica y que debería haber más comunidades y menos prisiones, puesto que según mi punto de vista, reinserta y reeduca más las comunidades que las cárceles, ya que lo único que existe en estas últimas es tráfico de drogas y castigos físicos y psíquicos a las personas que menos se lo merecen.

miércoles, 25 de mayo de 2011

¿REEDUCA LA PRISIÓN?

Una vez observada la exposición sobre la prisión que difundieron mis compañeras, me planteado centrarme en el papel y en las funciones que los educadores sociales tienen y desempeñan en este centro. Es decir, hay que tener en cuenta que en algunas cárceles la realización de funciones que desarrolla el educador social no son las que le corresponde, sino las del trabajador social u otro profesional.

Por ello, a continuación pienso que es interesante conocer un poco del Reglamento Penitenciario. Éste establece una concepción más amplia del tratamiento penitenciario, incorporando avances en el campo de la intervención y tratamiento tendentes a favorecer una vida en libertad con ausencia de registros delincuenciales. Entre los diferentes profesionales que intervienen en la ejecución de los programas de tratamiento se encuentran los educadores.

Hay que tener en cuenta que su origen legal lo encontramos en el artículo 25.2 de la Constitución Española: “ Las penas privativas de libertad están orientadas hacia la reeducación y reinserción social y no podrán consistir en trabajos forzados. El condenado que estuviera cumpliendo pena de prisión disfrutará de los derechos fundamentales de este capítulo, excepto aquellos que se encuentren limitados por el contenido de la sentencia condenatoria, por el sentido de la pena y por la ley penitenciaria. En cualquier caso, tendrá derecho a un trabajo remunerado, a los beneficios correspondientes a de la Seguridad Social, y al acceso a la cultura y al desarrollo integral de la personalidadi”.

Existe también una normativa internacional y europea que hace referencia a esta materia, siendo las más importantes las Reglas mínimas para el tratamiento de los reclusos y Las normas penitenciarias europeas, donde figura que el régimen penitenciario tiene que reconocer la importancia de un buen programa de educación física, de deporte y de actividades recreativas.

Asimismo, como se ha mencionado anteriormente el desarrollo de estos programas los lleva a cabo los educadores sociales.
Actualmente, el educador es miembro de la Junta de tratamiento y forma parte del equipo técnico. El Reglamento penitenciario vigente indica que todo el personal debe de colaborar directa o indirectamente con el tratamiento. En los equipos técnicos se ha dado entrada, en el
año 1996, a los educadores y otros profesionales por considerar que el tratamiento no deben de realizarlo exclusivamente los psicólogos, pedagogos o juristas-criminólogos.
Previamente he de resaltar que los educadores mientras desempañan su puesto de trabajo, están excluidos de funciones de régimen interior del establecimiento, “... si tuviera conocimiento de faltas reglamentarias, salvo aquellas que constituyan delito o pongan en grave peligro el orden general o la seguridad del establecimiento, actuarán con un criterio de discrecionalidad tratando de armonizar su deber de funcionarios con el fin del tratamiento y la correspondencia a la confianza que hayan depositado en ellos los internos”.


Sus funciones legales vienen reconocidas y están especificadas en el artículo 296 del Reglamento Penitenciario, y son las siguientes:

1. Atender al grupo de internos que se le asignen
2. Constituir progresivamente la carpeta de observación
2. Practicar la observación directa del comportamiento
4. Colaborar con los especialistas miembros del equipo
5. Asistir a las reuniones periódicas
6. Organizar y controlar las actividades deportivas y recreativas de los internos
7. Excepcionalmente pueden colaborar con los profesores de Educación General Básica en la tarea de instrucción cultural y en los establecimientos de régimen
abierto con los trabajadores sociales en la solución de los problemas laborales.

Estas son las funciones generales que tienen que realizar, ahora bien dependiendo de la
clasificación de los internos (primer, segundo o tercer grado de tratamiento o lo que es
lo mismo internos ubicados en centros de régimen cerrado, ordinario o régimen abierto)
los educadores realizan funciones diferentes y más específicas que es necesario
desarrollar.

Recientemente en un documento de trabajo la Dirección General de Servicios
Penitenciarios, Rehabilitación y Justicia Juvenil juntamente con los sindicatos más
representativos establecen que las funciones del educador social en regimen abierto
serían las siguientes:


  • Favorecer medios de reinserción social

  • Intervenir en la educación para la vida cotidiana

  • Derivar al interno a un recurso normalizado, si es posible.

  • Establecer y realizar un seguimiento institucional y postinstitucional

  • Trabajar en coordinación con los trabajadores sociales

Participación en los equipos profesionales del centro:

El educador como técnico del medio penitenciario, es miembro del equipo multidisciplinario, del equipo de educadores y de los órganos colegiados.

1. Equipo multidisciplinario
Tiene las siguientes funciones:
- Formular propuestas referentes a los internos
- Participar en la toma de decisiones
- Pedir y dar asesoramiento al equipo
- Coordinarse con el resto del equipo
- Realizar informes, a propuesta del centro, de los órganos judiciales, de la Dirección General o a iniciativa propia
- Colaborar con los derivaciones de los internos a los recursos externos, cuando sea necesario.

2. Equipo de educadores
El educador miembro del equipo de educadores tiene las siguientes funciones:
- Intercambiar información con el resto de los educadores
- Participar en el diseño del plan anual de trabajo
- Evaluar el plan anual de trabajo
- Evaluar las actividades de las que es responsable
- Asistir a las reuniones
- Coordinarse con el resto de los educadores

3. Órganos colegiados
El educador tiene que participar en los órganos colegiados que determine el
reglamento y con las funciones que especifique.

Ante todas estas funciones expuestas, se puede decir que la figura del educador es polivalente. Una de las funciones que quisiera resaltar es la coordinación debido a las dificultades que existen para ser llevada a cabo. Posiblemente estas dificultades partan de la delimitación de funciones de los diferentes profesionales que intervienen en el campo social, por la conquista de un hueco laboral. De esta forma los profesionales se ven como opositores y no como colaboradores. De todos estos
enfrentamientos los que resultan perjudicados son los usuarios porque indudablemente disminuirá la calidad de la intervención llevada a cabo.

Para concluir, pienso que los educadores sociales son los profesionales imprescindibles que no pueden faltar en las cárceles, ya que cómo se observa las finalidades de éstas son reeducar y reinsertar. Las cuales, se conseguirán con la intervención de estos profesionales mediante actividades educativas, terapeúticas y sociales. Así, para poder intervenir y hacer un buen trabajo, es necesario conocer las funciones que desarrolla un educador social en una prisión, puesto que algunos profesionales las desconocen y a la hora de trabajar en estos centros, realizan las funciones de los trabajadores sociales.
También quiero destacar que para trabajar en estos centros, los profesionales tienen que ser fuertes y sobre todo, ser empáticos, puesto que cada preso ingresa por distinta causa y debemos ponernos en el lugar de la otra persona para no dejar de intervenir o ignorarlo, puesto que es otro preso más que necesita reeducarse y no que lo castiguen, como pienso que hacen muchos profesionales y cárceles.

Con todo ésto, me gustaría compartir una experiencia de mi vida sobre la prisión. El año pasado nos comentaron la idea de visitar la cárcel Sevilla 1. En primer lugar, me lo pensé mucho porque decía: "qué personas habrá allí, si éstas me harían daño, si esta visita me influiría negativamente al estereotipar en general a los presos, etc y también me influyó, las aportaciones de mis compañeras, las cuales no fueron a visitarla".
Así, que después de mucho pensarlo, decidí ir porque podría ser otro lugar donde en un futuro podría trabajar, ya que no dejo al margen ningún colectivo para intervenir.
Entonces, una vez que fui me dí cuanta de que, en el exterior de estos centros, o sea, a la mayoría de los ciudadanos les dan mucho miedo los presos y piensan que nunca irían a una cárcel. Pero pienso que una vez que estas dentro, te cambia la mentalidad completamente. Escuchas testimonios ocurridos, hablas con personas tanto que están dentro por tráfico de drogas como por asesino y te das cuenta que cada uno de ellos ha cometido un delito distinto, aunque predomine los casos de tráficos de drogas. Todos son personas y necesitan ser tratados de la misma forma y por ello, no debemos ignorar a ninguno por haber cometido un delito más grave.
Ante todo esto, me gustaría trabajar en un futuro en este lugar, puesto que pienso que tengo mucho trabajo en estos centros centros, puesto que lo único que pretendo al trabajar en ellos es reeducar y reintegrar a los presos, no como hacen algunos profesionales castigar os por sus crímenes.
Así, que dejo al aire estas dos preguntas: Si castigas a un preso ¿qué ocurrirá cuando éste salga de la prisión? Y, si lo reeducas ¿qué pasará?.

SEMINARIO ANCLAJE

En nuestra sociedad existen muchas personas con problemas de alcoholismo. Éste ocurre cuando una persona muestra signos de adicción física al alcohol (por ejemplo, tolerancia y abstinencia) y continúa bebiendo, a pesar de los problemas con la salud física, la salud mental y las responsabilidades sociales, familiares o laborales. El alcohol puede llegar a dominar la vida y relaciones de la persona.

Asimismo, una de las características más trágicas del alcoholismo es el largo período de tiempo que pasa entre el surgimiento de los problemas de alcohol, su reconocimiento y la decisión de someterse a tratamiento.

Por ello, pienso que cada persona deberá evaluar hasta qué punto tiene control sobre su modo de beber así como cuáles son las consecuencias negativas del mismo antes de proceder a realizar los cambios constructivos que sean necesarios. Esto puede ser difícil puesto que hay varias etapas que son comunes a todas las familias con problemas de alcohol antes de que la persona sea consciente de que su modo de beber le está causando dificultades en su vida.

Entonces, es esencial comprender cómo afectan los pensamientos y sentimientos de la personas alcohólica a los miembros de la familia y cómo hacer frente ante éstos.

La primera etapa correspondería con la Negación del problema de alcohol. Es un periodo en el que el modo de beber de la persona empieza a causar problemas; él/ella o su familiar no son conscientes de esto. El hecho de que vivamos en una sociedad donde muchas personas beben alcohol hace que la negación sea más fácil.
La persona con problemas de alcohol puede decir, “De acuerdo, bebí mucho la noche pasada pero bebí igual que las otras personas que estaban en la fiesta. Yo bebí lo normal”. Los amigos y vecinos tratan de quitarle importancia a la posibilidad de que hay un problema de bebida. Cuántas veces habrás oído decir, “no seas tonto, todo el mundo bebió mucho alguna vez”, o “Si tu fueras un/a alcohólico/a, ¿qué sería yo entonces?”.
Si una persona bebe de modo excesivo, los miembros de la familia pueden justificarlo diciendo que lo hace así porque le ha pasado algo desagradable como: “una discusión con su jefe o un compañero de trabajo, etc.”. Esto puede ser cierto en el sentido de que las crisis pueden disparar la posibilidad de beber, pero existe un punto a partir del cual el beber aumenta todavía más los problemas creando otros nuevos. Una persona con problemas de alcohol debe hacerse responsable de su modo de beber, independientemente de las circunstancias que le lleven a ello.

Los problemas de bebida no son cosa de una noche. En muchos casos, una persona avanza desde un modo de beber social a periodos de intoxicaciones ocasionales hasta llegar un punto en que el alcohol interfiere en la vida de la propia persona. A menudo la familia niega que exista un problema y la necesidad de tratamiento se pospone durante mucho tiempo a causa de las actitudes y creencias que se tienen sobre el alcohol.

La siguiente etapa sería el Reconocimiento y sucede cuando la familia define la conducta de la persona con problemas de alcohol como una conducta que no es normal. De algún modo, la familia está reconociendo que la persona está bebiendo de un modo diferente al de las demás personas. Él/ ella puede que comiencen a beber más a menudo y prestar menos atención a la familia, al trabajo y a sus actividades en general. Comienzan a beber no sólo durante una fiesta sino antes y después de la misma también.
La siguiente fase es la de Enfrentamiento, en la cual los miembros de la familia pueden que traten los efectos del exceso de consumo con el familiar que tenga problemas de alcohol en un intento de hacerle consciente de las complicaciones que tiene con y por la bebida, y de la necesidad de un cambio. Es importante hacer esto de la manera más tranquila y natural posible y recordando las siguientes advertencias:

1. Debe hablarse con la persona en el momento en que esté sobrio o en el que tenga la menor cantidad de alcohol en el cuerpo, por ejemplo a primera hora de la mañana.

2. Resaltar tu preocupación y deseo de ayuda por la persona con problemas de alcohol, poniendo el énfasis en las cosas buenas de las que habéis disfrutado cuando esa persona estaba sobria.

3. Menciona de modo cuidadoso algunas de las consecuencias negativas de la bebida que has visto que le han sucedido, por ejemplo, perder días de trabajo, apartarse de la familia, ser más irritable, no recodar hechos (lagunas de memoria), etc.

4. Menciona que le apoyarás si se decide a asistir a tratamiento.

5. Finalmente recuerda que la decisión de abstenerse de beber sólo depende de la persona con problemas de bebida.

El control, sería la siguiente fase, en donde se intentaría controlar o asumir la responsabilidad del problema de bebida. Al principio las respuestas son muy variadas y los miembros de la familia intentan todo tipo de “recetas caseras” como método para controlar o detener el abuso de alcohol. Poco a poco, la familia siente un mayor temor y frustración. Es posible que los miembros de la familia comiencen a menospreciarse a sí mismo, a sentirse culpables y a temer un posible divorcio. Para evitar las discusiones puede que intenten evitar o proteger a la persona con problemas de alcohol. La familia se siente enfadada y rechazan que estén haciendo un gran esfuerzo y que no valga para nada.

Supervivencia. Se refiere a los intentos que realiza la familia para recuperarse a pesar del problema. Cuando la familia se da cuenta de que sus intentos para hacer frente a los problemas del alcohol han fracaso, se produce la desorganización de la unidad familiar, produciéndose los siguientes cambios:

1. El principal objetivo de la familia es sobrevivir. Las metas de la familia comienzan a cambiar y cansados, ya no intentan que cambie la conducta del bebedor.

2. Los roles o papeles de cada miembro de la unidad familiar comienzan a cambiar. Deben asumir las responsabilidades de enfermo alcohólico. Por Ej.: la esposa debe ser quien consiga sustentar a la familia y también los niños asumen ciertas responsabilidades del hogar. El actuar así refuerza y apoya a la persona bebedora de diversos modos:

a. Le permite evitar las responsabilidades desagradables gracias a la bebida.

b. Las responsabilidades y la presión de los miembros de la familia aumentan, aumentando de este modo la ira y el resentimiento hacia la PPB (Persona con problemas de bebida)

3. Los sentimientos hacia la persona con problemas de alcohol comienzan a cambiar. Los miembros de la familia pierden la preocupación y el respeto hacia esta persona.

La etapa final sería la Aceptación, común en todas las familias con problemas de alcohol. Es cuando el alcohólico acepta que existe un problema y que necesita acudir a tratamiento. Como la familia no sólo está cambiando roles, sino también los sentimientos hacia él/ ella, el bebedor / a se enfrentan con la posibilidad del aislamiento total y del rechazo.
Gracias a todo ello, la situación hace que la negación del problema sea imposible y que la PPB (persona con problemas de bebida) busque ayuda. Si, por otro lado, a la PPB la reorganización familiar le gusta, es decir, piensa “ahora ya nada impedirá que siga bebiendo”, entonces él/ella continuarán bebiendo. Por ello, su posibilidad de recuperación se hace muy difícil pero esta persona puede acabar incluso con mayores pérdidas o volverse aún más recelosos para acudir a tratamiento.

Sin embargo, también esta persona acaba reconociendo que necesita ayuda e iniciar un programa de tratamiento. Así, participa en el programa, donde pasará mucho tiempo dentro de éste, definiendo cómo utilizaba el alcohol y cómo podrá elegir conductas diferentes a las de la bebida para alcanzar los mismos efectos positivos que antes lograba con el alcohol.
El programa de tratamiento que inicia la persona con problemas de alcoholismo es el de actividades asociativas y complementarias al tratamiento de deshabilitación.
Este programa, según Anclaje, tiene varios objetivos como son dar a conocer la problemática del alcohol a la sociedad en general y a las instituciones en particular; concretar una serie de actividades que propicien el encuentro de socios y familiares de enfermos alcohólicos, ayudando con ellas a la concienciación de su realidad y la apertura a nuevas alternativas ajenas al consumo de alcohol y; fomentar el tejido asociativo y sus cualidades.

Así, con en el caso individual de esta persona, los profesionales se propondrán conseguir el segundo objetivo, concretar una serie de actividades que propicien el encuentro de socios y familiares de enfermos alcohólicos, ayudando con ellas a la concienciación de su realidad y la apertura a nuevas alternativas ajenas al consumo de alcohol, puesto que es necesario compartir actividades y experiencias con la familia para que la persona con problemas de alcoholismo se encuentre emotivada a la hora de recuperarse de su enfermedad y llegar a conseguir una vida independizada del alcohol.

Así, para concluir destaco que observo que es necesario en la sociedad una prevención sobre los efectos que provocan las distintas drogas, sobre todo el alcohol, puesto que es la droga que más muerte provoca y en cambio, los ciudadanos la ven como la droga “menos mala y perjudicial”al ser la más consumida de todas.
Entonces, en un primer lugar, de debe intervenir con los padres de los adolescentes, para que le inculquen a sus hijos que las distintas drogas perjudican a la salud y a la vida de la persona y la familia. Así, los niños/as, al ser informados por sus padres y también podría ser por los profesores, reflexionarán y tendrán en mente los consejos que estos agentes socializadores les han difundido.
Con respecto al trabajo que está realizando Anclaje, expreso que los profesionales que participan en esta asociación están poco a poco consiguiendo sus objetivos gracias a sus esfuerzos y participación, tanto del equipo interdisciplinar como de las personas con problemas de alcoholismo y sus familiares.

domingo, 1 de mayo de 2011

"La infancia ya no es la etapa de la ignorancia" (Fernando Savater )

En España, la infancia es percibida actualmente como un grupo poblacional que necesita menor atención que las personas adulta y mayores.

Las causas de esta imagen están relacionadas con la mejora en la supervivencia, el escaso peso relativo poblacional y la investigación científica centrada en la predicción de enfermedades en la edad adulta.

Asimismo, la sociedad no se da cuenta de que es un colectivo vulnerable y que presentan varios problemas. Éstos se encuentran relacionados con la manera de vivir de los niños/as y familias, es decir, con los estilos de vida, entendidos como no sólo conductas individuales, sino como patrones o formas de vivir que se conforman en gran medida por el contexto social y físico en el que se vive.

En concreto, el modo en que los niños/as disfrutan del tiempo de ocio tiene mucho que ver con la salud física y mental y con las relaciones sociales. Las dificultades actuales para el esparcimiento al aire libre, junto con el acceso a determinadas tecnologías, han hecho que las formas de entretenimiento cada vez más frecuentes sean la televisión, el ordenador y los videojuegos. Por ello, la práctica del ejercicio físico no es muy frecuente, y son más sedentarias las niñas que los niños. La práctica de deporte aumenta con el nivel de estudios y las diferencias por sexo (el 27% de los niños y el 15% de las niñas) aumentan con la edad.

Según mi punto de vista, estos abusos a las nuevas tecnologías afectan al estado de salud de los menores, aunque también al del resto de las personas, puesto que no se relacionan con otras personas y no practican ejercicios físicos como hemos mencionado. Además, puede ocurrir que estos niños lleguen a excluirse de los demás, al apartarse de la vida social.

Por todo ello, es necesario intervenir más con los niños/as en la infancia, puesto que es un grupo de población bastante olvidado actualmente en España a la hora de la planificación de políticas y servicios de salud, desde la identificación de las necesidades y problemas específicos hasta la definición de criterios pertinentes de calidad de su atención.

La investigación sobre la salud de la infancia es escasa en cantidad y en calidad, ya que a menudo no está diseñada específicamente (como en el caso de las encuestas de salud) o no permite identificar desigualdades, por lo que el conocimiento que tenemos de la salud de niños y niñas, y de sus determinantes es bastante limitado.

Así, es recomendable tener en cuenta estos tres aspectos:

Considerar los aspectos conceptuales de los determinantes de la salud, la visión del desarrollo y el ciclo de vida y los derechos de la infancia en la formulación, la implementación y la evaluación de políticas y servicios de salud para la niñez.

Para observar los derechos de los niños, expongo este video, el cual no puede incorporarse aqui, sólo el enlace.

http://www.youtube.com/watch?v=DHBicv6r3eM

Profundizar en la investigación para el conocimiento de la influencia de los determinantes microambientales y macroambientales en la salud y la calidad de vida de la niñez y en el análisis de su salud según el género y la clase social.

Fomentar la participación de niños y niñas, su desarrollo y capacidad de decisión en las acciones dirigidas a conocer su salud, necesidades y problemas, y a la hora de planificar, implementar y evaluar su atención.

No obstante, para conseguir estas recomendaciones es necesario la intervención de educadores sociales, para que les ayuden a los niños a conocerse (sus límites, cualidades, quiénes son, etc.) y a insertarlos positivamente en la sociedad.

Los educadores sociales no solo deben actúar con los menores en los centros educativos, sino que también en los centros hospitalarios. No obstante, en España estos profesionales no trabajan en los hospitales, excepto en Barcelona.

Así, es necesario la aparición de estos profesionales en los hospitales para la realización de actividades educativas para motivarles, distraerlos y se relacionen con otros menores. Un ejemplo de estas actividades es el proyecto propuesto por la Caixa, que se desarrolla en el Hospital Virgen del Rocio de Sevilla, el cual llamado Ciberaula Caíxa. Este proyecto lo debería llevar a cabo los educadores sociales, en cambio son los voluntarios los que imparten estas actividades a los niños/as, sin una formación previa.

Las funciones que llevan a cabo los educadores en estos centros hospitalarios son las siguientes:

- Ser útiles al niño/a hospitalizado/a.

- Adquirir recursos.

- Aprovechar y repartir los recursos.

- Mantener una adecuada comunicación y relación entre los/as miembros/as, tanto menores como familiares.

- Crear una buena estructura y dinámica de trabajo.



- Relacionarse con el exterior.

- Dar respuesta a los problemas que presentan los/as destinatarios/as del proyecto.

- Conocer el proyecto en el que participamos.

- Conocer a los niños y niñas: sus necesidades, intereses, ...

- Reflexionar sobre nosotros/as y sobre cómo trabajamos y cómo podemos mejorar.

- Programar y ejecutar las actividades.

- Desarrollar y transmitir entusiasmo.

- Desarrollar la iniciativa y la creatividad.

- Acoger a los/as nuevos Educadores/as Hospitalarios/as.

- Mantener la cohesión del grupo.

- Asistir a las reuniones.

- Solucionar conflictos y tensiones.

- Favorecer la unión.

- Comunicar e informar de casos.

- Ser crítico y sincero a la vez que innovador/a.

- Plantear problemas que existan.

- Buscar soluciones.

- Priorizar el trabajo.

- Revisar y dar salida a lo pendiente.

- Repartir tareas: saber distribuir recursos y esfuerzos.

Aunque pueda resultarnos difícil especificar las funciones del educador social, también es complejo destacar los ámbitos o espacios concretos en los cuales interviene el educador social. Podemos afirmar que en la realidad, su trabajo diario se dirige a: servicios de atención primaria y domiciliaria, servicios sociales, equipos de atención a la infancia y la adolescencia, equipos de valoración y orientación, protección y reforma de menores, centro de acogida, agentes de desarrollo local, albergues, ludotecas, equipos de educadores de calle, etc.


Con respecto a las familias de los niños/as enfermos, éstas se pueden ver sobreimplicadas y entonces erróneamente los sobreprotegen. Por lo tanto, hace falta
un trabajo educativo de apoyo y sensibilización por parte de los profesionales como el educador social; además, los familiares por sí solos no comprenden la naturaleza biológica de la enfermedad de sus hijos. Por todo ello, para lograr una buena interacción familiar es básico una estrecha colaboración entre los diferentes miembros de la familia y de éstos con el equipo multidisciplinario. Este trabajo conjunto hacia la familia y el menor enfermo evita sentimientos como la frustración, la desilusión, y la desmoralización, y, si se evita un exceso de estrés, se obtendrá un máximo de éxito en la resolución y enfrentamiento de problemas, para poder mantener el equilibrio para evitar recaídas en el niño/a y disminuir la alta emoción familiar expresada a causa de las carga que les supone.

Por todo ello, los familiares necesitan el apoyo y ayuda de profesionales como educadores sociales, con el fin de informarles sobre cuales son las actividades educativas que sus hijos deben realizar y qué estrategias tienen que desarrollar para que sus hijos se integren en la sociedad con mayor facilidad.

También, el educador social le puede ayudar a las familias, al informarles sobre los distintos recursos que existen, como el siguiente cuento, con el fin de motivarlos y tengan esperanza en que se van a recuperar pronto e integrarse en la sociedad.

http://cuentosparadormir.com/infantiles/cuento/billetes-de-cielo

Además, otro profesional muy importante por su labor con los familiares es el psicólogo, ya los miembros de la familia pueden concienciarse de la enfermedad de sus hijos y eliminar el estrés y depresión gracias a la cooperación con este especialista.

Para finalizar, según mi opinión expreso que es imprescindible la Pedagogía Hospitalaria, la cual es una escuela en el hospital, pero también lo lúdico y la atención a las familias de los niños hospitalizados, ya que tiene como fin procurar que los niños no pierdan el ritmo escolar durante la situación de ingreso hospitalario y tengan su desarrollo integral.

Asimismo, pienso que nosotros, como futuros educadores sociales, debemos tener en cuenta que el educador hospitalario debe comenzar desde el mismo momento en que el niño ingresa en el hospital, independientemente de la enfermedad que padezca o de la duración de su estancia hospitalaria, porque lo que queremos conseguir son los fines y objetivos propuestos.



miércoles, 20 de abril de 2011

OPINIÓN SOBRE EL TRABAJO DE LOS GITANOS

Una vez finalizado el trabajo sobre los gitanos, quiero expresar que me ha parecido muy interesante porque he conocido más a fondo la cultura de este colectivo, sus pensamientos sobre el papel de la mujer gitana y la percepción que tiene la sociedad sobre ellos.

Al observar todos los aspectos relevantes estudiados, me he dado cuenta de que, en muchos casos la situación de exclusión y de riesgo social existe también en la población en general, no sólo en el colectivo de gitanos, puesto que actualmente las dificultades de acceder al ámbito laboral les afectan a todos los ciudadanos y ésto provoca una situación de exclusión en la sociedad, al no poder acceder a los distintos servicios de ésta.

También, propusimos la campaña de sensibilización para concienciar a la clase sobre que, los gitanos son otro colectivo como cualquier otro y no por qué los medios de comunicación muestren una imagen negativa sobre ellos, debemos creernos ésta, puesto que sería interesante que cada vez que se mostrara una información negativa, fuésemos a descubrir si en realidad esa información es cierta o es errónea. Ésto ocurre en el programa “Callejeros”, en el que sólo se expresan connotaciones negativas y las personas que perciben el programa creen lo difundido y no descubren por sus propios ojos si es cierto o no.

Una vez me ocurrió un caso como este comentado, donde observé en este programa el barrio de Torreblanca, donde se expresaba que era un lugar con unas condiciones insalubres, donde existía mucho trafico de drogas y los hogares se encontraban en malas condiciones de conservación. Así, que un día tuve que ir para realizar un trabajo con una compañera, me enseñó su barrio y vi que lo transmitido en la televisión no era cierto porque era un barrio como cualquier otro, es decir, normal y me di cuenta que lo único que le interesaban a los medios de comunicación era sacar la parte marginal de este lugar.

Por otra parte, la cooperación y relación con las demás compañeras ha sido buena porque nos hemos organizado de forma correcta, apoyado cuando hemos tenido alguna dificultad al comprender algún concepto y al realizar algún apartado del trabajo, hemos respetado las opiniones y aportaciones de las compañeras y por último, elegimos dos días a la semana para dedicárselo al trabajo, como fueron martes y miércoles por la tarde de 17:30 a 21:00 horas.

Con respecto a la exposición del trabajo, me he sentido tranquila, aunque pensaba que me iba a poner más nerviosa al podermese olvidar algún apartado de la exposición o al ver que no les interesaba el tema a los compañeros, al ser un tema poco novedoso. Pero menos mal que todo salió muy bien y a los compañeros le gustaron la exposición, al ser amena con distintas y varias dinámicas, las cuales las realizamos durante la exposición y no al final, para que fuera divertida la exposición y no se aburrieran.

También observé al finalizar con el breve debate, que ellos comentaban que es cierto que los gitanos se sienten excluidos en la sociedad como muchas personas payas y que muchas veces en las peleas no son los culpables ellos, sino los payos. Por eso, no debemos generalizarlos a todos como que son iguales y eliminar los estereotipos como “los gitanos son unos vagos”, porque no es que ellos no quieran trabajar, sino que la situación laboral actual está muy difícil para toda la sociedad y no sólo para el colectivo gitano.

Para concluir, en general este trabajo me ha parecido adquisitivo realizarlo porque he aprendido mucho al conocer la cultura gitana más a fondo y al transmitirle a mis compañeros que este colectivo no es homogéneo, sino heterogéneo y que debemos intervenir con ellos porque nos pueden aportar mucha información relevante. Así, también podremos eliminar los estereotipos y prejuicios que todos tenemos sobre ellos, aunque muchas personas no lo reconozcan y podremos actuar en un futuro con él, para sacarlo de la marginación y exclusión donde actualmente se encuentran algunos de ellos.